Reseña #81: Los Cazahuesos ; 8/10

De nuevo, y como la última reseña de Malaz fue hace bastante, me siento en la necesidad de alabar la pedazo de pluma que tiene este autor. La combinación de descripción y acción aparece aquí increíblemente bien reflejada. La verdad es que en este volumen cada escena te consigue poner los pelos de punta. Cada ambiente, personaje y momento se describe minuciosamente, consiguiendo que te lo imagines con todo detalle. Las imágenes se recrean en tu cabeza a la perfección y ves cada batalla, cada paisaje como si estuvieras allí mismo. Adoro esa sensación. Pero no creáis que es una lectura lenta en ese sentido, para nada. Ese detallismo afecta también a las escenas más dinámicas, porque crea las batallas con tal detalle que es imposible no imaginarlo como una película. Erikson, con su pluma, consigue introducirte en su mundo y que veas con tus propios ojos las mismas escenas que él recrea en su mente. 

Además, habría de añadir un hecho que, para mí, es algo que le suma demasiados puntos a estas novelas. Se trata de la violencia desmesurada. Cuando aparecen escenas violentas, y son muchas, el autor no censura nada. Es decir, que si tiene que explicarte cómo se le caen las tripas a un soldado al que han abierto en canal, lo hará con todo lujo de detalles. Mutilaciones, desmembramientos, aplastamientos, incineraciones... Es todo tan gráfico que engancha. 

En la línea de estos puntos positivos,  me gustaría destacar concretamente dos capítulos del libro. No voy a haceros ningún spoiler, pero necesito comentar ciertas cosas sobre ellos, porque madre mía qué intensidad. El primero sería el Capítulo 7. Se trata del más largo, de unas cien páginas, y comprende una de las batallas más brutales que he leído. Literalmente estuve las cien hojas pegada al borde del asiento, leyendo y leyendo, sin levantar la cabeza. ¡Era adictivo! Qué escenas, qué momentos más tensos, qué personajes tan increíblemente buenos... El otro capítulo está casi al final: el Capítulo 23 es el más increíble de todo el libro. Literalmente he tenido que dejar de leer unos minutos porque no quería empapar las páginas con las lágrimas. Estaba en completa tensión, sin poder dejar de leer, sólo quería saber qué pasaba y por qué, y en qué iba a acabar todo ello. ¡Buf! Me ha dejado tocada ¿eh? Muy sensible. 

Otro de los aspectos más geniales de la novela, y de la saga entera, son los personajes. Les estoy cogiendo tanto cariño a todos, incluidos los que me caen mal, que cuando hay alguna batalla o les pasa algo, me agarro a la silla de la tensión. Lo bueno de una novela con esta enorme cantidad de personajes es que siempre tienes unos cuantos con los que conectas en seguida y que te marcan. Y a mí me ha pasado demasiado, por suerte, dado que aquí se juntan los argumentos anteriores, he podido disfrutar de todos ellos. 

Para terminar, quisiera tener en cuenta que, aunque el final ha sido caótico, me ha dejado con un hype tan impresionante que incluso me he planteado coger el séptimo como siguiente lectura. Es que ¡madre mía! ¿Por qué me hacéis esto? ¿Por qué me odiáis? Ne-ce-si-to saber qué ocurre. Por favor. Esto no se hace señor Erikson, no puedes dejarme así. No estoy bien, por tu culpa. 

Los Cazahuesos es una de las mejores novelas de la saga de Malaz que he leído hasta ahora. Compite directamente con Memorias de Hielo. Y se trata de una novela intensa, violenta, llena de acción, de sangre y de escenas increíblemente intensas. El argumento te va a atrapar desde el principio y te va a mantener en tensión, aunque bueno, si lo pensamos bien, eso podría compensar el hecho de que tengas que estar leyendo este libro como si tu vida dependiera de ello. No perdáis ni un detalle o no os enteraréis de nada. ¿Es complicado? Sí. ¿Merece la pena? Muchísimo. Menuda maravilla y qué ganas de La Tempestad del Segador.