¡Buenas tardes, queridos lectores! ¡Última entrada de Mayo! Jeje Vengo justita, ¿eh? He tardado, lo sé, he tardado mucho en leerme este libro. Pero entre las clases, luego la cuarentena y que mi rutina de lectura basada en los viajes a la universidad desapareció de pronto, he tenido entre cero y menos cien ganas de leer. ¡Pero ya está aquí! Y la verdad es que me arrepiento de no haberlo terminado antes. ¡Menudo libro! Buf. Ha sido una lectura intensa, no os lo voy a negar... ¡DENTRO RESEÑA!
Datos
Datos
Título: Memorias de Hielo
Autor: Steven Erikson
Páginas: 1167 páginas
Editorial: NOVA
Año de publicación: 2018 (presente edición)
Título original: Memories of Ice
Traductor: Marta García Martínez
ISBN: 978-84-666-9266-6
Género: Alta fantasía.
Pertenece a: Malaz: El libro de los caídos
Precuela: Las Puertas de la Casa de la Muerte
Secuela: La Casa de Cadenas
Pero con más los clanes antiguos que se están reuniendo. Los t'lan imass se alzan para responder a una antigua llamada primitiva. Algo maligno amenaza este mundo: las sendas están envenenadas y abundan los rumores sobre un dios que se ha deshecho de sus cadenas y está empeñado en vengarse...
Entramos de nuevo en el mundo de Malaz, ese lugar tan complejo, pero, a la vez, tan interesante. Como siempre, quiero resaltar la pluma de este autor. Las descripciones son una auténtica maravillosa, sean de preciosos parajes fantásticos, como de acciones dinámicas, está todo muy bien escrito. La forma que tiene me impresiona, siempre he aspirado a este tipo de escritura porque me parece la más apasionante. Y no es en ningún momento cargante. No se centra en minucias, pero te crea unos escenarios y unas escenas que son de película. Esto se ve, sobre todo y como siempre tengo que mencionar, en la crudeza de los sucesos violentos. Es tal el grado de descripción que puedes imaginar cada apuñalada, explosión o muerte como si lo estuvieras viendo en el cine. Impresionante, de verdad. Eso sí, si no os gusta la sangre, creo que no es para vosotros.
Esta nueva entrega nos proporciona dos cosas muy importante: la aparición de nuevos dioses y la evolución de ciertos personajes y su toma de importancia a partir de este volumen. En cuanto a lo primero, el mundo de Malaz parece complicarse cada vez más. La mitología de esta saga me recuerda enormemente a El Señor de los Anillos y me sorprende la capacidad de creación de su autor. Aunque puede sorprendernos la cantidad de divinidades, héroes y criaturas que tenemos, nos acabamos acostumbrando y gracias a los glosarios y los dramatis personae que nos ofrece el libro al principio y al final, es imposible perderse. Con respecto a lo segundo, decir que creo que, a partir de ahora, encontraremos personajes que cada vez irán teniendo mucho más protagonismo a lo largo de la saga (aunque es muy pronto para asegurarlo, ya que me quedan por delante siete libros que, sin duda, me sorprenderán). Uno de ellos es, sin duda, ya de mis favoritos: Anomander Rake. ¡No os puedo decir nada pero es genial!
Y, si hablamos de personajes, tenemos que destacar el papelón que realizan las mujeres en este libro. Todas y cada una de ellas están perfectamente construidas. Sus personalidades son arrolladoras, honorables y valientes, tan fuertes que dejan por los suelos a muchas protagonistas que yo conozco. Todas y cada una de ellas son diferentes, pero impresionantes a su manera y me parece absolutamente precioso. Son personajes que no se meten con calzador como en ocasiones he comentado de algún libro o película. Todas tienen un papel importante y lo desempeñan de la mejor manera.
Para terminar con los puntos positivos, a pesar de que podría seguir pero tampoco quiero haceros spoilers de nada, quiero destacar el final. Desde el capítulo veinticuatro hasta el final os juro que no he soltado el pañuelo. La emotividad de las escenas, los momentos trágicos... Madre mía... Cada hoja está marcada por los lagrimones que soltaba. Los anteriores libros no poseían la fuerza para hacer que llorara así, pero el cariño a los personajes y la construcción tan detallada e intensa de estos momentos... Menuda llorera. Ha sido genial.
Pocos son los contras que he encontrado a esta enorme maravilla de novela, pero bien es cierto que he de comentar ciertas cosas. Para empezar, hablaré de la lentitud. Como ya os he venido diciendo en las anteriores reseñas de esta saga, estos libros suelen desarrollarse de forma lenta, pero a un ritmo constante. Esto, de normal, no ha supuesto problema alguno, pero si juntamos la lentitud con una cantidad de hojas por capítulo interesante y, además, con cambios de escena constantes... Puede que se haga el principio un poco pesado. Esto también se ha visto influenciado por la cronología de este libro, ya que esperamos que suceda los acontecimientos del libro precedente cuando, en realidad, son contemporáneos y realmente ocurre cuatro meses después de los hechos de Los Jardines de la Luna. No es algo excesivamente malo, pero nos puede despistar bastante.
Memorias de Hielo es una novela intensa, compleja y muy adictiva. Te muestra un mundo cada vez más trabajado del que no vas a querer salir y necesitarás continuar con el siguiente libro como sea. Los personajes son espectaculares, cada uno es único y todos poseen algo que te harán amarlos, de momento no he encontrado ninguno que me haya decepcionado en este sentido. Si no os importa la lentitud del principio y queréis amar el final, tenéis que leeros esta novela. Es imprescindible.
Resumen
Una fuerza aterradora ha surgido en el continente asolado de Genabackis. Como una marea de sangre corrompida, el Dominio Painita cruza el continente como lava hirviente que consume a todos los que no escuchan la palabra de su profeta, el Vidente Painita. En su camino se interpone una alianza incómoda: la hueste de Dujek Unbrazo y los veteranos Abrasapuentes de Whiskeyjack, junto con antiguos adversarios: el caudillo Caladan Brood, Anomander Rake y sus tiste andii. Superados en número y desconfiando de todo y de todos, deben hacer llegar el mensaje a cualquier posible aliado, incluyen las Espadas Grises, una hermandad mercenaria que ha jurado defender a toda costa la ciudad sitiada de Capustan.Pero con más los clanes antiguos que se están reuniendo. Los t'lan imass se alzan para responder a una antigua llamada primitiva. Algo maligno amenaza este mundo: las sendas están envenenadas y abundan los rumores sobre un dios que se ha deshecho de sus cadenas y está empeñado en vengarse...
Opinión personal
He tenido unos sentimientos encontrados a lo largo de toda esta novela. Hay partes que me han enfurecido, otras que me han conmovido, otras sorprendido, otras entristecido... Ha sido un torrente de sentimientos, sobre todo al acercarme al final del libro. Pero ha merecido completamente la pena.No es momento de ocultarse tras los muros del templo. Ni el momento de políticas absurdas. Servimos a Fener recorriendo la tierra empapada e hirviente, con las armas desnudas en una promesa de azogue. Somos los choques y el estruendo, los bramidos de rabia, el dolor y el terror...
Esta nueva entrega nos proporciona dos cosas muy importante: la aparición de nuevos dioses y la evolución de ciertos personajes y su toma de importancia a partir de este volumen. En cuanto a lo primero, el mundo de Malaz parece complicarse cada vez más. La mitología de esta saga me recuerda enormemente a El Señor de los Anillos y me sorprende la capacidad de creación de su autor. Aunque puede sorprendernos la cantidad de divinidades, héroes y criaturas que tenemos, nos acabamos acostumbrando y gracias a los glosarios y los dramatis personae que nos ofrece el libro al principio y al final, es imposible perderse. Con respecto a lo segundo, decir que creo que, a partir de ahora, encontraremos personajes que cada vez irán teniendo mucho más protagonismo a lo largo de la saga (aunque es muy pronto para asegurarlo, ya que me quedan por delante siete libros que, sin duda, me sorprenderán). Uno de ellos es, sin duda, ya de mis favoritos: Anomander Rake. ¡No os puedo decir nada pero es genial!
Y, si hablamos de personajes, tenemos que destacar el papelón que realizan las mujeres en este libro. Todas y cada una de ellas están perfectamente construidas. Sus personalidades son arrolladoras, honorables y valientes, tan fuertes que dejan por los suelos a muchas protagonistas que yo conozco. Todas y cada una de ellas son diferentes, pero impresionantes a su manera y me parece absolutamente precioso. Son personajes que no se meten con calzador como en ocasiones he comentado de algún libro o película. Todas tienen un papel importante y lo desempeñan de la mejor manera.
En cuanto a sí mismo, cometió crímenes a los que solo se podía responder con la muerte. Que lo ejecutaran aquellos supervivientes que quedaran entre sus víctimas. Pero no una simple muerte, él busca algo más. Busca la condenación como sentencia. Una eternidad de condenación. No alcanzo a entender semejante odio por sí mismo
Para terminar con los puntos positivos, a pesar de que podría seguir pero tampoco quiero haceros spoilers de nada, quiero destacar el final. Desde el capítulo veinticuatro hasta el final os juro que no he soltado el pañuelo. La emotividad de las escenas, los momentos trágicos... Madre mía... Cada hoja está marcada por los lagrimones que soltaba. Los anteriores libros no poseían la fuerza para hacer que llorara así, pero el cariño a los personajes y la construcción tan detallada e intensa de estos momentos... Menuda llorera. Ha sido genial.
Los primeros en entrar. Los últimos en salir. Por última vez
Pocos son los contras que he encontrado a esta enorme maravilla de novela, pero bien es cierto que he de comentar ciertas cosas. Para empezar, hablaré de la lentitud. Como ya os he venido diciendo en las anteriores reseñas de esta saga, estos libros suelen desarrollarse de forma lenta, pero a un ritmo constante. Esto, de normal, no ha supuesto problema alguno, pero si juntamos la lentitud con una cantidad de hojas por capítulo interesante y, además, con cambios de escena constantes... Puede que se haga el principio un poco pesado. Esto también se ha visto influenciado por la cronología de este libro, ya que esperamos que suceda los acontecimientos del libro precedente cuando, en realidad, son contemporáneos y realmente ocurre cuatro meses después de los hechos de Los Jardines de la Luna. No es algo excesivamente malo, pero nos puede despistar bastante.
Memorias de Hielo es una novela intensa, compleja y muy adictiva. Te muestra un mundo cada vez más trabajado del que no vas a querer salir y necesitarás continuar con el siguiente libro como sea. Los personajes son espectaculares, cada uno es único y todos poseen algo que te harán amarlos, de momento no he encontrado ninguno que me haya decepcionado en este sentido. Si no os importa la lentitud del principio y queréis amar el final, tenéis que leeros esta novela. Es imprescindible.
Rebecca a mí la cubierta ya me pone a temblar jejeje... Creo que este libro no es para mi. Pero gracias por la reseña. Besos
ResponderEliminarLas cubiertas de todos estos libros son impresionantes, esta es de las que más me llamó la atención y de las que más me gustan, eso sí, ¡no dejes que te eche para atrás!
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