Una buena novela histórica es como una bebida fría, en la sombra, durante un verano caluroso. Es una experiencia increíble. Soy gran fan de las novelas que están ambientadas en la Antigüedad y cuando me topo con una que merece la pena, me siento muy feliz. Tal vez no es un género muy querido, porque encima es súper específico, pero es genial encontrar buenas historias entre muchas famosas que no merecen nada la pena. He de decir que estaba deseando, también, leer una novela más cortita, que últimamente mis libros no bajan de las 800 páginas.
Autor: Robert Harris
Editorial: DeBolsillo
Año de publicación: octubre 2004
Año de la presente edición: 2005
Título original: Pompeii
Traductor: Fernando Garí Puig
ISBN: 978-84-9793-753-8
Género: Histórica (Antigua Roma). Ficción
Pertenece a: Autoconclusivo
Precuela:
Secuela:
Resumen
Año 79 d.C. Faltan 48 horas para la catástrofe.
Un relato histórico y de intriga ambientado durante la trágica erupción del Vesubio. Una sofocante semana a finales de agosto del año 79 d.C. ¿Que mejor lugar para pasar los últimos días del verano que la bahía de Nápoles? A lo largo de toda la costa, los ciudadanos más ricos del imperio se relajan en sus lujosas villas, la flota más poderosa del mundo descansa pacíficamente fondeada en Miseno y los visitantes gastan su dinero en las localidades de Herculano y Pompeya. Solo un hombre parece preocupado.
El ingeniero Marco Atilio Primo acaba de hacerse cargo del Aqua Augusta, el enorme acueducto que suministra agua potable al cuarto de millón de habitantes de las nueve ciudades de la bahía de Nápoles, y por primera vez desde hace generaciones, los manantiales se están secando. Su predecesor ha desaparecido y hay un problema en algún punto de los noventa kilómetros de la conducción principal, al norte de Pompeya. Justamente en las faldas del Vesubio.
Atilio responsable, respetable, práctico, incorruptible asegura a Plinio, comandante de la flota imperial y famoso erudito, que puede reparar el acueducto antes de que los depósitos de reserva se queden sin agua. Pero mientras se encamina hacia el Vesubio, se dispone a descubrir que hay fuerzas que ni el imperio más grande del mundo puede detener…
Opinión personal
Una buena novela histórica siempre se disfruta, sin importar el momento ni las circunstancias. Hay pocas cosas que me resulten tan placenteras como sumergirme en una historia bien contada, con ese equilibrio entre rigor y narrativa que convierte la lectura en una auténtica fantasía.
En el caso de Pompeya, de Robert Harris, ya partía con una buena impresión: conocía al autor por algunos de sus textos, especialmente sobre mitología griega, así que saber que se había aventurado en la novela me dio mucha tranquilidad. Sentía que quien estaba detrás de estas páginas sabía de lo que hablaba y, por tanto, trataría el tema con el respeto y la profundidad que merece, más allá de los elementos ficticios que pudiera incluir.
Pronto intentaré compartir una publicación más detallada sobre lo que pienso de la novela histórica y sobre cómo creo que los autores pueden abordar este género para sacar el máximo partido a sus posibilidades narrativas sin perder el rigor que lo hace tan especial.
En cuanto a Pompeya, puedo decir que es una muy buena novela: está magníficamente escrita y la ambientación es realmente envolvente. Harris logra recrear el mundo romano con gran precisión, haciendo que el lector sienta que camina entre las calles de la ciudad antes de su destrucción. No diría que es una historia trascendental o que deja una huella profunda, pero sí que es una lectura sólida, entretenida y bien construida. Una obra que se disfruta mucho y que cumple con creces lo que promete.
Lo primero que quiero destacar de la novela (y la verdad es que siempre empiezo por aquí porque me parece lo mejor) es la pluma de Robert Harris. El estilo es sencillo y directo, lo cual facilita mucho la lectura. Aunque utiliza términos técnicos y vocabulario en latín, estos nunca resultan inaccesibles; siempre están bien contextualizados o explicados dentro del propio texto. A mí -como profe de latín e historiadora especializada en la Antigüedad- me hace mucha ilusión que las novelas históricas incluyan textos, palabras o expresiones en las lenguas que se utilizaban entonces, es un detalle que permite que te sumerjas más en la historia y en la ambientación. Así que no tengáis miedo por cómo indica las horas, los días, los cargos políticos, etc., que todos quedan súper claros y no necesitáis saber latín para comprenderlos todos. Esto permite que el lector aprenda sin sentirse excluido o abrumado, lo que se agradece especialmente en una novela histórica.
Lucharía gustoso contra cualquier enemigo mortal, pero solo un loco se hace a la mar para combatir a la naturaleza.
Uno de los puntos fuertes del libro es la ambientación. Harris logra trasladar al lector a la antigua Pompeya de manera muy vívida. La descripción de la ciudad, su gente, costumbres y tensiones previas a la erupción del Vesubio están tan bien trazadas que es fácil imaginarse caminando por sus calles. Te describe gran parte del trazado geográfico de la región, del volcán, de los edificios y de las propias carreteras. Tu mente consigue introducirse en cada descripción para recrear sus palabras a la perfección. Sí que es verdad que la historia es harta conocida y que a estas alturas de la vida todo el mundo conoce la ciudad de Pompeya, aunque sea por películas, series o fotos; pero aún así la manera en la que Harris lo describe todo consigue una ambientación perfecta, mezclada con una historia interesante.
Obviamente, otra de las cosas que estoy obligada a comentar es la base histórica de la novela. Se nota que Harris tiene una formación completa en la materia y, además, ha realizado una investigación en profundidad para acercar la ficción de esta novela a la realidad. Al final del libro aparece la bibliografía utilizada y, además, -un puntazo en mi opinión- recoge escritos de manuales sobre vulcanología en cada capítulo que describen las erupciones volcánicas como la ocurrida en Pompeya, dando datos al lector sobre la fuerza, la cantidad de piedra, las causas, etc. Una mezcla perfecta que da mucho más realismo a la historia.
La naturaleza no ha hecho mejor regalo al hombre que el de la brevedad de su vida.
Para terminar, hay que hablar del final. Aunque ya desde el principio de la novela sabes cómo va a acabar todo, el desenlace sigue siendo uno de los momentos más impactantes de la novela. El clímax está muy bien construido, transmitiendo tensión y dramatismo de forma efectiva. Es un cierre adecuado para la historia, que logra mantener al lector enganchado hasta la última página. Es verdad que también, como lectora, quería algo más aparte de lo conocido, creo que ha sido una buenísima manera de concluir la historia.
Aunque es una buena novela, no deja una huella profunda. La historia es tremendamente conocida, así que no te va a sorprender en casi nada, más allá de la buena manera que tiene de contarlo. Lo narra estupendamente, la ambientación es espectacular, pero claro, ¿quién no conoce en 2025 lo que pasó en Pompeya? Todos nos hacemos una idea de cómo ocurrió, ya sea porque vimos la horrible película que hicieron Kit Harington y Emily Browning o porque hemos leído sobre la historia o visitado la ciudad. Sin embargo, esto no quiere decir que la novela y la historia no sean buenos. Se disfruta, pero no marca.
Otros héroes conquistaron hombres, pero él consiguió derrotar al destino.
Para acabar, hay que mencionar la construcción de los personajes. Dado que la novela es bastante cortita y que hay una gran cantidad de personajes (creo que demasiados, en mi opinión), ya que (a pesar de que Atilio es el personaje principal) hay varios povs, no hay tiempo suficiente para profundizar en sus historias o matices, lo que impide que generen una verdadera conexión emocional. No logran generar una empatía real con el lector, así que lo dramático de la novela no es tan intenso como debería ser en un principio. Esto afecta al impacto del final, que podría haber sido más conmovedor si los vínculos afectivos con los personajes fueran más fuertes.
En resumen, Pompeya de Robert Harris es una novela histórica muy bien hecha. Tiene una ambientación increíble, está muy bien documentada y el estilo del autor hace que sea fácil de leer, incluso si no sabes mucho sobre historia o sobre la Antigua Roma. Es una historia que se disfruta mucho y que cumple con lo que promete: entretener, enseñar un poco y hacer que te sientas dentro de ese momento tan impactante del pasado.
Ahora bien, también hay que decir que no es una historia que vaya a cambiar tu vida. Ya conocemos lo que pasó en Pompeya, así que no hay muchas sorpresas. Además, aunque los personajes están bien construidos, no llegas a conectar del todo con ellos, así que el final —aunque es intenso— no emociona tanto como podría.
Aun así, es una lectura muy recomendable, sobre todo si te gustan las novelas históricas que mezclan bien realidad y ficción. Pompeya no intenta contarte algo completamente nuevo, pero sí lo hace de una forma muy cuidada, y por eso merece la pena leerla.
¡Hola!
ResponderEliminarLa novela histórica siempre me ha dado mucho respeto, porque siento que no voy a entender bien o que no voy a saber distinguir si se trata de una novela con buena documentación o no. Leyendo tu reseña, creo que este libro puede ser una buena forma de meterme en el género, ya que conozco lo que ocurrió, pero no en profundidad. Así que sería un buen ejercicio de perderle el miedo al género. ¡Muchas gracias por tu reseña!
Nos vemos entre páginas
La vida de mi silencio
¡Pues sí! Creo que esta novela es perfecta para comenzar, más después de haber visto las páginas de bibliografía que trae al final. Y al ser cortita se te pasará enseguida. Si en algún momento la lees, me encantaría saber tu opinión al respecto.
Eliminar¡Gracias por tu comentario!
Un abrazo.